¿Qué sucede cuando cientos de jóvenes se ponen se pie para decirle que sí a la vida? ¿Cómo explicar con palabras ese momento de fulgor?
Eso fue lo que ocurrió un Martes por la noche en Naciones Unidas (New York) después de finalizada la magnífica conferencia disertada por Lila Rose, una joven activista pro-vida que aporta su granito de arena para defender sagazmente la protección de la vida desde su concepción.
En dicha ponencia ante los cientos de jóvenes de todo el mundo que yacían expectantes, Lila Rose enseñó en pantalla gigante los videos de una investigación encubierta efectuada desde su organización Live Action. En las filmaciones se puede apreciar, una y otra vez, el modus operandi ilegal que ejecuta la clínica abortiva más grande de USA, Planned Parenthood. Se llevan a cabo verdaderas prácticas aberrante sin importar la edad ni el motivo, ya que toda mujer puede acceder al aborto independientemente de que eso implique la destrucción de una vida inocente. Y lo peor aún, es que nadie se enterará de nada, pues la clínica garantiza en forma fraudulenta el encubrimiento de un crimen que se comete en el más oscuro silencio, entre las cuatro paredes blancas de una sala.
“El aborto mata la paz del mundo…Es el peor enemigo de la paz, porque si una madre es capaz de destruir a su propio hijo, ¿qué me impide matarte? ¿Qué te impide matarme? Ya no queda ningún impedimento ” (Madre Teresa de Calcuta)
Lila explica que las empresas abortistas, con el fin de incrementar la cantidad de abortos, crean una conciencia social a favor de la muerte bajo la premisa “mi cuerpo, mis derechos”. Seducen a las mujeres enseñándoles que pueden hacer lo que quieran con su cuerpo y con la vida que llevan consigo. De esta manera, el Estado deja el futuro de sus hijos en la decisión de la madre, poniendo todo el peso de la carga en la mujer, haciéndola única responsable de la vida de su hijo.
En este mismo sentido, cuando la vida en el seno materno es entendida como un objeto de propiedad, y no como una persona humana, el aborto se promociona como la solución más apta para aquellas mujeres embarazadas que desean prosperar en el futuro laboral y social. Es entonces cuando un bebé pasa a ser una enfermedad, una bolsa de basura de la que hay que deshacerse lo antes posible para que no se pudra en casa. Una noción puramente materialista ajena de todo amor y humanidad.
Las consecuencias de la filosofía del descarte son claras. Explica Lila Rose,
“Cuando tomas al miembro más débil de la sociedad y le niegas sus derechos humanos en vez de protegerlo, no podemos tener la paz que tanto deseamos. Lo que queda es una crisis de derechos humanos que yace en el núcleo de la sociedad, no hay resabios de paz”
Finalmente, nada mejor que compartir uno de los mensajes de aliento que Lila obsequió a los jóvenes cuando tenía apenas 23 años…
“Si estás aquí y esta es tu primera marcha a favor de la vida: primero de todo, debes saber que es maravilloso que estés aquí. Debes saber que hay una razón por la que estás aquí. El Espíritu Santo va a trabajar en tu vida y en la vida de otras personas por el simple hecho de que tú estás aquí hoy. Así que estén abiertos a las inspiraciones que van a recibir. Estén abiertos a
aprender más. Estén abiertos a dejarse inspirar. Estén abiertos a comprometerse más, y permitan que lo que están viviendo los colme de coraje e inspiración, porque así será, esto solamente puede ser (…)”
Al mismo tiempo, Lila nos recuerda la importancia de nuestro compromiso… “No solamente hagas esto una vez al año. ¿Sabes? Que tu estés aquí es fantástico, pero te necesitamos mañana, te necesitamos el próximo día. Te necesitamos el Domingo en la Iglesia. Te necesitamos en la escuela defendiendo la vida. Te necesitamos votando a favor de la vida. Te necesitamos alentando y trabajando con tus amigos para que no elijan abortar. Necesitamos que los ayudes a luchar por la castidad, a luchar por la integridad sexual, defendiendo la santa pureza. Te necesitamos hablando sobre la verdad cada vez que tengas la oportunidad. Te necesitamos haciendo videos, hablando y construyendo debates. Hay muchas maneras de involucrarse. Te necesitamos todos los días, no sólo hoy.”
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